En cualquier juego el trasfondo juega un papel muy importante, no solo basta con jugar, detrás tiene que haber algo mas porque sino el juego acaba perdiendo interés, en el mundo de los videojuegos desde hace bastante tiempo salen al mercado títulos con una trama muy desarrollada, pasando a un segundo plano la cantidad de enemigos a los que disparar o su espectacularidad, el primer gran ejemplo en el mundillo de las consolas fue Final Fantasy X presentado en el año 2001, pese a lo lineal que es la acción en el juego, la historia que narra es la que te hace engancharte a el.
En el mundo de los juegos de miniaturas GW es el mejor ejemplo de un trasfondo complejo sus dos grandes juegos Warhammer Fantasy y Warhammer 40.000 desarrollan una historia creo que única en el mundo de las miniaturas, el trasfondo de los juegos les ha permitido ademas de crear juegos paralelos a esos mundos los llamados juegos de especialistas, una extensa publicación de novelas, algunos videojuegos e incluso alguna película animada, hasta en sus libros de ejércitos tienen el trasfondo particular de la raza que corresponda, desde mi punto de vista Warhammer 40.000 es una de las mejores historias contadas, les faltaría dar el salto a la gran pantalla.
No solo los trasfondos creados de "cero" dan mucho vida a los juegos de cualquier tipo, las historias basadas en libros, películas o con una base histórica también le dan un aliciente al juego, los juegos sean de miniaturas, cartas, juegos de mesa o rol basados en; Star Wars, el Señor de los Anillos, Juego de Tronos o en acontecimientos históricos Segunda Guerra Mundial, época Napoleónica, edad antigua, pese a ser historias ya creadas o reales no dejan de darle un toque especial al juego, resumiendo el trasfondo tiene mucha culpa de que un juego nos guste mas que otros solo por la historia que desarrolla y crea.
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